“Tenía 17 años cuando por primera vez consumí el gas hilarante de forma recreativa. Fui cauteloso, pero el hecho de que el gas se vendía en un supermercado ayudó a calmar mi inquietud. Si de verdad fuese nocivo, seguramente no lo ofrecerían de esta manera legal y abierta a todos”, manifiestan muchos jóvenes sobre el gas hilarante.
Los expertos en el área de la salud dicen que ese enfoque representa un inicio común para muchos jóvenes en el uso recreativo del óxido nitroso. Un desconocimiento de sus riesgos y la accesibilidad comercial han contribuido a crear una apariencia inocua del gas. Lea aquí: Ser feliz en la vida y el trabajo a través de la inteligencia espiritual
A causa de ello, se ha registrado un aumento de consumidores adolescentes en EE. UU. y Europa. En Reino Unido incluso ha llegado a ser el tercer narcótico más consumido entre los jóvenes de 16-24 años según un informe del gobierno británico de 2020.
Como reacción, varios gobiernos han empezado a regular el uso de esa sustancia. Reino Unido lo prohibió, mientras Países Bajos ahora lo clasifica como una droga. En EE. UU., la venta del gas por minoristas fue restringida en Luisiana. Asimismo, las autoridades alemanas están evaluando la posibilidad de una prohibición. Pero ¿qué es lo que hace tan peligroso al gas de la risa? Lea aquí: La adicción a internet en los adolescentes afecta las redes neuronales
¿Qué es el gas hilarante?
Gas hilarante es el termino coloquial para referirse al óxido nitroso (N2O), un compuesto químico de nitrógeno y oxígeno.
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Se usa principalmente en el ámbito de la salud para relajar a los pacientes durante tratamientos dolorosos, como cirugías dentales o partos. Los usuarios describen su efecto como un “subidón” en el cual uno puede llegar a sentirse mareado, delirante y desorientado. Lea aquí: OMS alerta sobre los riesgos del cambio climático en embarazadas, niños y adultos mayores
Su efecto es efímero. Normalmente dura entre 30 y 60 segundos, lo cual requiere una aplicación repetida para el uso recreativo.
En la industria también se usa para hacer crema batida, de ahí su disponibilidad en los supermercados.
¿El óxido nitroso puede llegar a ser adictivo?
Una evaluación de estudios científicos concluyó que, a pesar de que la mayoría de los usuarios consumen el gas hilarante de forma inusual, existe un subgrupo de consumidores frecuentes que podrían sufrir un trastorno por abuso de sustancias.
Los autores recomendaron que la sustancia se clasificara como “potencialmente adictiva” hasta que se llevaran a cabo estudios más conclusivos. Lea aquí: Osteoartritis: las mujeres mayores de 50 años son más propensas a padecerla
¿Cuáles son los efectos negativos del consumo del gas hilarante?
Aparte de sus efectos estupefacientes de efecto efímero, a largo plazo, el consumo regular del gas hilarante también puede causar complicaciones neurológicas.
Esto se debe a una inactivación de la vitamina B12, que es esencial para la producción de la mielina, una capa protectora que rodea los axones de los nervios. Lea aquí: OMS lanza alerta tras la primera muerte humana por gripe aviar
De manera similar a lo que sucede en la patología de la esclerosis múltiple, sin esta capa protectora las señales eléctricas del cerebro se pierden, y de esa forma disminuye la capacidad del cerebro de comunicarse con el resto del organismo.
Los primeros síntomas de este deterioro neurológico incluyen una sensación de hormigueo y entumecimiento en las manos y los pies. Más tarde pueden empeorar hasta provocar “un paso tambaleante y no coordinado”, debilidad en las extremidades, rigidez muscular, problemas intestinales, incontinencia, y hasta una disfunción sexual. Lea aquí: Un estudio revela los riesgos de nanopartículas en el embrión durante el embarazo
Los efectos negativos pueden ser remediados, pero solo si son tratados tempranamente.